la serpiente arco iris

Uno de los mitos de creación más extendidos y conocidos entre los aborígenes australianos es el de la "Serpiente Arco Iris", también llamada  "Madre Serpiente".
En español se ha difundido en la red una versión de este mito.
Hoy comparto contigo otra versión de este interesante mito.

Durante el Tiempo de los Sueños, toda la Tierra descansaba en un profundo sueño. Nada crecía, nada se movía. Todo estaba tranquilo y en silencio. Los animales, pájaros y reptiles dormían en el interior de la Tierra. Un día la Madre Serpiente se despertó y reptó por el interior de la Tierra hasta llegar a la desierta superficie.
Comenzó a recorrer la Tierra y a medida que avanzaba, abría profundos surcos, mientras que otras partes las dejó lisas y desiertas. Así recorrió la Tierra hasta volver al punto de partida. Ahí llamó a las ranas, que tardaron mucho en salir porque sus panzas estaban llenas con agua. La serpiente Arco Iris rascó sus panzas y cuando las ranas rieron, fluyó el agua llenando los surcos creados por la serpiente en su recorrido. Así se formaron los lagos y ríos. Pasto y árboles comenzaron a crecer y así comenzó la vida. Todos los animales, pájaros y reptiles se despertaron y siguieron la Madre Serpiente por la Tierra. Ella al ver que algunos animales peleaban creó leyes para convivir en paz y armonía. La Madre Serpiente castigó aquellos animales, que no cumplían sus leyes, convirtiendolos en piedra para que no puediesen seguir recorriendo la Tierra. Así se formaron montes y montañas. La Madre Serpiente premió a los que vivían en paz, convirtiendolos en seres humanos. Ellos recibieron un tótem representando su orígen. Así las tribus se reconocían por sus tótems y se respetaban mutuamente.